Este tranquilo arenal blanco y brillante se prolonga muchos metros hacia el interior, hasta el pinar que la cierra, está flanqueado por acantilados altos, muy accidentados. Estos elementos, sumados a su belleza, se traducen en que sea una playa muy frecuentada por las familias.
También destaca la media docena de escars escavados en el acantilado por los pescadores para guardar sus barcas. El acceso por carretera es sencillo.
No
De la playa
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